Desde que Miguel me dijo que salía a coger setas, estaba soñando con probar ese manjar. Ayer, me mandó una fiambrera llenita de setas de pino y fueron un regalo de cumpleaños inigualable. La receta también es de Miguel. No os digo más que las probéis, estaban de muerte, me acabo de dar un festín... Pero si no sabéis diferenciar las setas, no las cojáis del campo, mejor que las compréis. Yo he tenido la suerte de tener este regalo directamente del campo a mi cocina ¡Gracias, Miguel!
Ingredientes:
1 fiambrera grande llena de setas de pino.
3 ó 4 dientes de ajo.
1 chorreón generoso de vino blanco.
Sal al gusto.
Aceite.
Preparación:
- Con una brocha, vamos sacudiendo las setas por ambos lados para que pierdan la poquilla tierra que les quede.
- Cortamos un poquito el tronco de cada seta, no mucho.
- Ponemos una sartén con un chorreón de aceite y pasamos los ajos pelados y troceados.
- Cuando los ajos están frititos, añadimos las setas, salamos al gusto y añadimos el chorreón de vino. Dejamos hacer a fuego lento. Yo voy bajando el fuego conforme va empezando a hervir fuerte.
- Cuando haya reducido el caldo hasta quedar una salsita espesa, retiramos del fuego.
Ya tenemos nuestras setas listas para comer, las podemos degustar así o bien acompañarlas de arroz blanco, servirlas como acompañamiento de carnes, pescado... eso ya lo dejo a vuestro gusto, con lo que las pongáis os quedarán exquisitas. ¡Buen provecho!
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