Croquetas de zanahorias

Este fin de semana hemos venido con un cargamento de verduras del huerto de Joaquín, así que como era de esperar, me he puesto manos a la obra para preparar recetas nuevas. Las croquetas de zanahoria son una de las cosas que siempre he querido probar pero nunca me había puesto manos a la obra; pero un día, mi amiga Inma me dio una receta y desde entonces las tengo pendientes. Bien, pues aquí os dejo esta receta totalmente ecológica y muy sabrosa. Tengo que deciros que la he tuneado un poco con mi toque personal. Espero que os guste.

Ingredientes:

250gr de zanahorias.

1/2 cebolla mediana.

1 puñado de piñones.

Harina la que admita.

Leche (puede ser entera, desnatada, semi...).

1 pastilla de caldo de pollo o en su defecto sal.

Aceite.

1 pizca de nuez moscada.

2 huevos.

Pan rallado (aproximadamente 1/2 paquete).

Preparación:

En una sartén, echamos un chorreón de aceite y las zanahorias y cebolla ralladas. Si tenéis picadora o Thermomix, mejor, porque rallarlo todo es un poco pesado. Dejamos que se hagan con el fuego medio y cuando estén listas, echamos la leche. Yo voy echando hasta que quede toda la mezcla de zanahorias y cebolla cubierta y no se vea nada. Bien, seguidamente, vamos echando cucharadas de harina y removiendo hasta que se disuelvan. La masa estás hecha cuando se despegue fácilmente de las paredes y el fondo de la sartén. Cuando lleguemos a este punto, echamos los piñones y movemos para que se integren con la masa. Dejamos la masa enfriar sobre un plato o fuente. Una vez fría, hacemos las croquetas y las pasamos por pan rallado, huevo batido y pan rallado otra vez. Una vez tengamos toda la masa hecha croquetas, vamos a freírlas. Ponemos una sartén con abundante aceite del que más os guste, y cuando esté caliente, las vamos echando hasta que estén doraditas. Tened cuidado que no se pasen de tiempo porque se rompen fácilmente. ¡Listo! Nuestras croquetas están preparadas para llevarlas a la mesa. Podemos servirlas con un alioli casero muy suave para que no le reste sabor. ¡Buen provecho!