Roscos de vino

Estaba ojeando el blog "Cocina compartida" cuando vi esta receta y no me pude resistir. Allí le llamaban a estos roscos "Roscos de la agüela Paca", y claro, irremediablemente, me acordé de mi abuela Paca, mi ángel de la guarda, y aunque ella no hacía roscos y tampoco era su fuerte la cocina, esta receta fue capaz de evocar en  mi tantos recuerdos que no he dudado en hacerla. Bueno, os dejo la receta y espero que os gusten. La receta original es para hacer mucha más cantidad pero la he reducido porque aquí somo sólo dos y no somos capaces de comernos tantos roscos. 

Ingredientes:

1 kg de harina.

500ml de aceite de oliva.

250ml de vino blanco de mesa.

60gr de azúcar.

6gr de levadura.

1 puñado de matalahúga.

La ralladura de un limón.

1 cáscara de limón.

Aceite de girasol o semillas para freir los roscos.

Azúcar para espolvorear los roscos.

Preparación:

Ponemos en una sartén el aceite de oliva con la matalahúga y la cáscara de limón. Dejamos que se fría, cuando el limón suba a la superficie estará listo. Apartamos del fuego, retiramos la cáscara de limón y dejamos enfriar. Si lo hacemos la noche anterior, tomará más sabor. Echamos el aceite con la matalahúga en un bol grande y añadimos el vino, el azúcar y la ralladura de limón. Mezclamos un poco. En otro bol aparte, cernimos la harina junto con la levadura y reservamos. A la mezcla que teníamos de aceite, vino, azúcar y limón, le vamos añadiendo la harina poco a poco, amasamos con las manos. Finalmente, hacemos las rosquillas y las freímos en aceite caliente. Cuando las saquemos del fuego, las dejamos escurrir sobre papel de cocina para que suelten el aceite y luego las pasamos por azúcar. Espero que os guten.