Yo la verdad, es que no soy muy aficionada a los churros, porque las cosas fritas no me sientan muy bien, pero una vez al año, no hace daño, y además, los días de lluvia invitan a desayunar unos churros con un café de pucherete, un chocolate, un té... lo que queráis estará bueno, seguro. La receta es de La cocina de lechuza. Os dejo esta receta y espero que os gusten igual que a mi.
Ingredientes:
1 tazón de agua.
1 tazón de harina del mismo tamaño que el de agua.
1 cucharadita de levadura en polvo.
1 cucharadita de sal.
Aceite de oliva para freír.
Preparación:
- Ponemos el agua al fuego y cuando empiece a hervir, la retiramos y echamos de golpe la harina mezclada con la levadura y la sal. Al principio será un engrudo, pero seguiremos moviendo hasta que se despegue de las paredes de la cacerola que hayamos utilizado. Siempre fuera de fuego.
- Dejamos reposar un par de minutos para que se enfríe.
- Rellenamos la churrera o bien una manga pastelera con una boquilla en estrella, con la masa.
- Sobre una superficie seca, vamos haciendo tiras largas de masa y las dejamos entibiar hasta que se enfríen-
- Cortamos churros al tamaño que queramos.
- Ponemos aceite en una sartén y vamos friendo los churros por tandas. Es mejor que el aceite no esté excesivamente caliente para que no se quemen por fuera y queden crudos por dentro.
- Dejamos escurrir los churros sobre papel de cocina absorvente.
Bueno, espero que disfrutéis del desayuno, yo voy a dar buena cuenta del mío...
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